A pesar de las recomendaciones de los gobiernos federal y estatal, sobre todo en la sana distancia, que indica que las personas deben estar separadas un metro y medio, la población sigue frecuentando carros de comida, ahí, la aglomeración es inevitable. En contra parte, los restaurantes solo pueden vender para llevar.
Al hacer un recorrido por la zona centro, se puede observar en la ciudad, que en la mayoría de puestos que venden comida, hay hombres y mujeres que se acercan a consumir, en ocasiones hay muy pocas personas pero llegan momentos en que se juntan hasta 8 o 10 personas y no se respetan las distancias marcadas por la Secretaría de Salud.
Sobre el tema, el secretario municipal, Roberto Carréon Huitrón, indicó que los decretos federal y estatal obliga a los restauranteros a trabajar en los pedidos a domicilio, ya sea llevarlos o qye los clientes los recojan en la sucursales. Por el momento está prohibido consumir alimentos en los comedores de los locales.
Los decretos no facultan a la autoridad municipal para prohibir que se consuma alimento en los puestos. Sin embargo se están efectuando recomendaciones para que los propietarios de dichos negocios ambulantes consideren el lavado de manos, uso de gel antibacterial, separación de mesas, uso de cubre bocas, entre otras medidas. Para que estén conscientes de la contingencia que se está viviendo.
