Varios vecinos de la colonia Nicolás Bravo más conocida como kilómetro 92 nos externaron su inconformidad en cuestión del propietario de un establo que se localiza por la calle 9a a orillas del canal, ya que cuando llueve el agua arrastra todo el estiércol de las vacas por las calles introduciéndose a los hogares.
Por varios años se ha tenido este problema que aqueja a varias cuadras de la colonia, poniendo en mal la salud de los niños y adultos.
“Hemos puesto nuestra queja y levantado firmas para que este señor se mueva de ahí, pero no hace caso, indicó una vecina afectada.”
Esto genera un foco de infección para toda persona, ya se a teñido casos de niños con enfermedades en la piel u otros males.
Hasta el momento la queja se a interpuesto con el comisario del lugar, tratando de acudir a otras instancias como Protección Civil y el departamento de Ecología municipal para que se haga algo al respecto.