A lo largo de la vida, los huesos están en constante adaptación para mantener la homeostasis mineral del cuerpo, por ello, se le recomienda a las personas que tomen la siguiente bebida para mantener su corazón y huesos fuertes.
En las revistas “Osteoporosis” y “Metabolismo Mineral”, comentan que las personas están en constante adaptación a lo largo de la vida, sobre todo el tejido óseo, los huesos y algunos órganos que “cambian” conforme tu alimentación.
Por esa razón, se le recomienda a las personas que se cuiden y tomen una vez al día un vaso de “leche dorada”, la cuál es una alternativa natural rica en calcio, hierro, magnesio, minerales y zinc.
La “leche dorada” que se recomienda tomar es la que está hecha con ajonjolí, canela, pimienta y cúrcuma, ya que estos ingredientes favorecen el metabolismo, cuidando tus huesos, favorece la salud cardiovascular y es antioxidante.
Además, tiene un fuerte efecto antiinflamatorio y es capaz de neutralizar radicales libres, lo cuál puede prevenir afecciones inflamatorias como la artritis. También ayuda a estabilizar los niveles de glucosa en la sangre y ayuda a despejar las vías respiratorias.
A continuación, te dejamos la receta para hacer la “leche dorada”:
Ingredientes –
250 g de ajonjolí (debe estar en remojo por lo menos 4 horas)
1 litro de agua
½ cucharadita de cúrcuma
Una pizca de canela
Una pizca de pimienta
Preparación –
Remojar el ajonjolí: coloca las semillas en un recipiente con suficiente agua y déjalas reposar durante al menos 4 horas. Esto suaviza su textura y mejora la digestión. Una vez pasado este tiempo, desecha el agua del remojo (puedes reutilizarla para regar plantas, como sugiere la autora)
Licuar: añade las semillas escurridas a una licuadora con un litro de agua limpia. Incorpora también la cúrcuma, la canela y la pimienta. Licúa todo durante varios minutos hasta obtener una mezcla homogénea
Colar (opcional): si prefieres una consistencia más ligera, puedes filtrar la bebida usando una manta de cielo o colador fino. También puedes dejarla tal cual para aprovechar toda la fibra
Servir o complementar: puedes tomarla sola o, si no estás acostumbrado al sabor de las leches vegetales, agregarla a un batido o calentarla ligeramente con cacao puro
