La vocación de servir no conoce horarios ni condiciones, y los bomberos del Municipio de Meoquí lo demuestran cada día.
La mañana de hoy, mientras el equipo del Departamento de Bomberos se dirigía a continuar labores en el relleno sanitario del Nuevo Loreto, vivieron un momento de gran tensión cuando su camión, debido al peso, se ladeó y terminó cayendo en una de las zanjas de un camino de terracería.
El incidente, que por fortuna no dejó lesionados, fue un recordatorio de los riesgos constantes que enfrentan estos héroes anónimos en su lucha diaria por la seguridad de su comunidad.
“Fue un gran susto, pero estamos con bien”, expresó uno de los elementos, reflejando la fortaleza y entrega que los caracteriza.
Cada salida, cada misión, implica un compromiso con la vida de los demás, pero también con la suya propia.
Pese a las dificultades y a la incertidumbre de cada jornada, su determinación sigue intacta: regresar a casa con la satisfacción del deber cumplido.
