Los tics son movimientos involuntarios, breves y repetitivos que pueden afectar a diferentes músculos del rostro.
Los tics pueden ser molestos, y en algunos casos, incluso causar preocupación. Sin embargo, entender las causas subyacentes puede ayudar a liberar la ansiedad.
Los tics faciales son contracciones rápidas y repetitivas de los músculos del rostro. Estos pueden manifestarse de diversas formas, como parpadeo excesivo, movimientos en los labios, sacudidas de nariz, o fruncimiento de la frente.
Las causas de los tics pueden ser el estrés y ansiedad que se ocasiona cuando una persona está bajo presión, así como la fatiga y la falta de sueño también pueden contribuir a la aparición de estos. También pueden tener una base genética, si uno o ambos padres tienen tics faciales.
Para manejarlos puedes reducir el estrés con meditación, yoga, respiración profunda y actividad física, la meditación, la terapia, las rutinas de sueño saludables, el ejercicio regular y la alimentación balanceada.
