Caminar es una actividad que a menudo subestimamos pero es más poderosa de lo que aparenta y aquí te contaremos las razones.
En un mundo donde las rutinas de ejercicio a menudo incluyen entrenamientos intensos o equipos sofisticados, este simple y accesible movimiento ha ganado un lugar destacado en la investigación científica.
Diversos estudios sugieren que caminar no solo beneficia al cuerpo, sino que también puede transformar el bienestar general de manera significativa.
Esta actividad, además de ser positiva para la salud, es de bajo costo y fácil de incorporar en la rutina diaria.
Estos son los 9 beneficios de caminar que hasta ahora eran desconocidos:
-Mejorar la salud cardiovascular: Cuando una persona se ejercita de manera regular, se fortalece el músculo del corazón, lo que mejora su capacidad de bombear sangre a los pulmones y al resto del cuerpo.
-Controla el paso: Caminar ayuda a controlar el peso, pues quema calorías si una persona agrega 30 minutos de caminata enérgica a su rutina diaria, podría quemar alrededor de 150 calorías más al día.
-Mejora la salud mental: Tanto los niños como los adolescentes y adultos que practican ejercicio tienen un mejor riesgo de depresión en comparación con sus pares. La actividad física disminuye los sentimientos de ansiedad.
-Beneficia la salud ósea y articular: Actividades como caminar, correr y levantar pesas, que implican soportar peso, ayudan a desarrollar y mantener la densidad ósea.
-Aumenta la energía y combate la fatiga: La actividad física regula poder fortalecer los músculos y aumentar la resistencia.
-Mejora la digestión: Caminar a un ritmo ligero en cualquier momento es beneficioso para la salud, pero un paso corto entre 60 y 90 minutos después de comer puede ser especialmente útil para reducir los picos de azúcar en la sangre.
-Favorece la salud cerebral: Caminar fortalece las conexiones en tres redes cerebrales, una de las cuales está asociada con el Alzheimer.
-Fortalece el sistema inmunológico: Caminar puede ayudar a eliminar bacterias de los pulmones y vías respiratorias.
-Mejora la calidad de sueño: Diferentes estudios han encontrado que las personas que practican actividad física regularmente alcanzan el sueño profundo con mayor facilidad y durante periodos más largos en comparación con los que no se ejercitan.
