Un problema recurrente en casi todas las ciudades al trabajar en la vía pública para la reparación de fugas o introducción de servicios, es la destrucción que se hace al pavimento, lo anterior ocurre porque existen descuidos a la hora de terminar el trabajo, explicó Mario Mata Carrasco Director Ejecutivo de la Junta Central de Aguas.
Sostuvo que queda mal por no tener cuidado a la hora de volver a tapar la zanja, pues utilizan la mayoría de las veces el mismo material que extrajeron de la perforación, pues quienes realizan esta labor deben llevar calichi y luego compactar para aplicar el material de sello, trátese de asfalto o cemento.
Ante esta situación, se decidió que la reparación de principio a fin, quedará bajo responsabilidad de las Juntas Municipales de Agua, sostuvo el funcionario, con ello se evita la tramitología en los municipios, pero, además, quien abra el pavimento deberá ser un plomero autorizado, para que deje la obra terminada.