Este invaluable tesoro prehispánico, sustraído durante décadas, vuelve a casa reafirmando el legado cultural de México.
Tras años de esfuerzos diplomáticos y arqueológicos, México ha logrado un hito cultural con la recuperación del «Portal del Inframundo» Olmeca. Esta pieza prehispánica, que fue sustraída hace décadas, ahora está de vuelta en casa, reafirmando la rica historia y el patrimonio cultural de la nación.
La importancia de esta pieza para la identidad y el patrimonio cultural mexicano no puede ser subestimada. Como señaló el arqueólogo Mario Córdova, la pieza tiene un gran significado para la idea que los mexicanos tienen de sí mismos. La falta de esta pieza se sintió como una herida, y su retorno representa la sanación y la celebración de la cultura y la historia de México.
La pieza prehispánica representa al cerro Chalcatzingo, en el estado de Morelos, y destaca por su intrincada representación de la cara de un jaguar con grandes ojos ovoides, cejas flamígeras y las fauces abiertas en forma de cruz. La presencia de plantas características de Chalcatzingo y un personaje no identificado dentro de un círculo sobre la nariz de serpiente del jaguar, contribuye a su singularidad.
Una Joya Prehispánica Vuelve a Casa
El «Portal del Inframundo» Olmeca no es solo un artefacto; es un testamento del pasado de México. Su pérdida, y ahora su recuperación, ha marcado un hito en la protección del patrimonio cultural mexicano. Su regreso simboliza no solo la restitución de un artefacto robado, sino también la recuperación de una parte fundamental de la identidad nacional.
El Viaje del Portal del Inframundo
El camino de regreso a casa para esta pieza no ha sido fácil. Sustraída a finales de los años 50, su paradero estuvo desconocido durante varios años antes de que fuera ubicada en los Estados Unidos a finales de los años 60. Incluso fue expuesta en el Museo Metropolitano de Nueva York durante un breve período en los años 70.
La Importancia Cultural
La importancia del «Portal del Inframundo» va más allá de su valor arqueológico. Como una pieza preclásica (800-400 a.C.) de la civilización Olmeca, refleja las creencias y el mundo espiritual de una de las sociedades más antiguas de Mesoamérica.
Celebrando la Recuperación
El regreso de la pieza a México ha sido recibido con alegría y orgullo. El canciller mexicano, Marcelo Ebrard, expresó en la ceremonia de entrega en Denver, que el retorno de la pieza «nos restituye algo que nos explica de dónde venimos y que es parte del patrimonio del pueblo de México».
El Futuro del «Portal del Inframundo»
El futuro del «Portal del Inframundo» ya está trazado. Será la pieza central de un museo que se construirá en Morelos, su lugar de origen. Allí, su imponente presencia seguirá contando la historia de las culturas antiguas de México a las futuras generaciones, preservando así la memoria del pasado prehispánico del país.
En definitiva, la recuperación es un triunfo para México. Es un recordatorio de la rica y antigua historia del país y un testimonio del compromiso inquebrantable de México con la protección y preservación de su patrimonio cultural.
