El gobernador Javier Corral lamentó que “cada fin de semana es un acelerador” de COVID-19, por eso adelantaron el Semáforo rojo, que durará quince días más y luego “revisaremos” para decidir si se mantiene «o cambia a naranja”.
Durante entrevista, el gobernador de Chihuahua afirmó que “el propio Lopez Gatell hizo reconocimiento a la decisión de Chihuahua de adelantarse” al Semáforo rojo.
Esto es debido a que normalmente el Semáforo COVID cambia los lunes, pero el “rojo” en Chihuahua entró en vigor el pasado viernes 23 de octubre con nuevas restricciones.
Sobre la decisión de adelantar el Semáforo, advirtió Javier Corral Jurado que “cada fin de semana es un acelerador” de contagios de COVID-19, lo que provocaría que desborden aún más los hospitales con elevados niveles de ocupación.
Después de cada fin de semana “inmediatamente se ve el impacto”, pues “cuando vemos movilidad” siguen poco después los ingresos a hospitales de enfermos con el coronavirus o sospechosos.
Sobre el “rojo” de máximas restricciones en el Semáforo COVID, el gobernador explicó que “lo queremos mantener así quince días” y al terminar ese periodo, “revisar si podemos regresar al ‘naranja’”.
Pero es una posibilidad, ya que tendrían que bajar los índices para entonces, siendo que la propia Secretaría de Salud federal advirtió que pronostican que en quince días será el pico máximo de contagios de toda la pandemia en el estado de Chihuahua.
Ello podría traducirse en más semanas en “rojo”.
Por otra parte, está vigente hasta el 31 de diciembre la Ley Seca que prohíbe la venta de alcohol desde jueves y hasta el domingo en toda la entidad.
Durante el fin de semana en el estado captaron grandes concentraciones de gente, a pesar de los críticos niveles de hospitalizados, intubados, contagios y muertes por coronavirus.
