Comer papaya por la noche puede ser una excelente opción debido a sus múltiples beneficios nutricionales y efectos positivos en el cuerpo.
Aunque existe la creencia de que comer fruta por la noche es «malo», esta fruta tropical, rica en vitaminas A y C, fibra, antioxidantes, potasio y papaína, es conocida por favorecer la digestión y contribuir a una alimentación equilibrada.
Los beneficios son:
Mejora la digestión. La papaína, una enzima presente en la papaya, ayuda a descomponer las proteínas y promueve un tránsito intestinal saludable, lo que puede ser especialmente útil después de una cena pesada
Favorece el sueño. Contiene colina, un nutriente que mejora la calidad del sueño, la memoria y el funcionamiento muscular, haciéndola ideal para consumir antes de descansar.
Baja en calorías y saciante. La papaya es ligera, contiene alto contenido de agua y fibra, lo que puede ayudar a controlar el apetito nocturno y evitar excesos calóricos
Regula el azúcar en sangre. Es apta para personas preocupadas por mantener estables los niveles de glucosa, siempre que se consuma en porciones moderadas
Aunque es una opción saludable, su efecto laxante puede ser problemático, así que evita consumirla en grandes cantidades por la noche. Además, no se recomienda sustituir una cena completa por fruta de manera habitual, ya que no aporta todos los nutrientes necesarios.