México.- A una semana del arranque de un nuevo sexenio en México, el primero con una Presidenta, Diego Luna se dijo con esperanzas en ver un México distinto.
«Espero lo que espero siempre, que las cosas cambien, que cada vez vivamos en un mejor País, que podamos ser más libres, más felices, que no tengamos que aceptar los niveles de violencia con los que tenemos que convivir. Siempre espero que las cosas mejoren», compartió el actor y productor a su paso por la alfombra roja de su nueva serie, La Máquina, la noche de este martes.
El protagonista de Rogue One: Una Historia de Star Wars siempre afirma estar orgulloso de su tierra y su cultura, por lo que ha buscado impulsar historias que despierten lo mismo en sus compatriotas.
Como ejemplo está La Máquina, ambientada en el mundo del box, el cual cree no se ha mostrado lo suficiente en pantalla.
En el programa, que se estrena este miércoles en Disney+, Luna da vida al representante de un boxeador, el cual es interpretado por su socio y amigo de toda la vida, Gael García Bernal.
«Sin duda creo que con el boxeo se pueden hacer grandes analogías sobre este país, sobre el viaje de la perseverancia de muchos y muchas por salir adelante. Los referentes del boxeo mexicano, en particular Julio César Chávez, fueron esenciales para esa comunidad.
«Para un país que entiende la derrota profundamente, que de repente haya personajes que de hecho ganan ¡y están en el boxeo! No lo hemos festejado suficientemente como comunidad», opinó Luna.
Por la convicción que tienen de enaltecer ídolos nacionales del deporte, Luna y Gael García Bernal no sólo se acompañaron en su alfombra por su elenco, sino también por boxeadores, incluidos Mariana Juárez «La Barbie» y Humberto «Chiquita» González, quienes se dijeron felices de ver retratadas experiencias que conocen en los capítulos de la serie.
Para una función especial en un teatro en Polanco asistieron personajes del elenco, como Lucía Méndez, Karina Gidi, Andrés Delgado y Raúl Briones, pero el furor lo despertaron Luna y García Bernal, a quienes los fans llamaban a gritos para conseguir fotos y autógrafos.
