Washington.- Ahora que está tratando de regresar a la Casa Blanca, el ex presidente Donald J. Trump se ha comprometido a reducir a la mitad los costos de la energía para los estadounidenses en el lapso de un año, como parte de un plan para reducir la inflación y lograr que las tasas de las hipotecas vuelvan a tener un bajo récord.
Sin embargo, economistas y analistas — y el propio récord de Trump durante su primer término — sugieren que es improbable que pueda hacer esas promesas.
El compromiso de Trump para reducir dramáticamente el costo de la vida depende en parte de sus planes para expandir rápidamente la perforación hidráulica para obtener petróleo y gas y reducir los impedimentos que tiene el gobierno para empoderar la construcción de plantas, que él afirma podría reducir las facturas de energía en “más de la mitad”.
Cuando disminuyan los precios, según afirma habitualmente, las tasas de interés y las tasas de las hipotecas también se reducirán.
Sin embargo, Trump no ha citado otros análisis económicos para apoyar sus afirmaciones.
La investigación económica y la experiencia histórica sugieren que los presidentes tienen sólo un efecto limitado en los servicios eléctricos que son regulados localmente o en el costo del petróleo, que es un producto que se negocia globalmente.
“Él no tiene realmente las herramientas para disminuir los precios del petróleo y poder reducir a la mitad los precios de la gasolina”, comentó Steven Kamin, miembro del conservador Instituto de Empresas Americanas y ex economista de la Reserva Federal.
En resumen, los expertos y la evidencia anterior sugieren que Trump está excediéndose en las promesas sobre temas económicos clave relacionados con los precios y tasas de interés.
Y eso encaja con un patrón que él estableció durante sus anteriores campañas — en las que ha enfatizado enormes y populares resultados poniéndole poca atención a los costos o en cómo podría cumplir sus promesas.
El que un presidente pueda ayudar a reducir los precios de la electricidad un poco, es el resultado de factores complejos como una mayor inflación, aumento en la demanda, regulaciones y algunos impactos como una temperatura extrema.
En cuanto a la promesa concreta de Trump de disminuir los precios de la gasolina a menos de 2 dólares por galón, varios analistas de energía dijeron que no hay una manera obvia en que pueda cumplir esa promesa.
