Ciudad de México.- La temporada 2024 le exigirá a Sergio Pérez desarrollo y evolución constante de su estilo de manejo.
Aunque la base del RB20 es similar a modelos anteriores, se introdujo un nuevo diseño en los pontones, radiadores y la tapa del motor que obliga al mexicano a adaptarse al bólido lo antes posible.
Y en cuanto a Checo, hay áreas de oportunidad para sacar mayor provecho de sus habilidades y volver como candidato al título de la F1.
Una de ellas y quizás la más importante es cómo utiliza el pedal del freno en los recorridos.
«La clave de todo está en la regulación de las frenadas. Sergio es de los mejores frenando en toda la parrilla y lo demuestra en pistas callejeras o semipermanentes como Canadá, Mónaco, donde hay frenadas muy fuertes. Él regularmente tiene un abuso del pedal del freno.
«Hace las frenadas mucho más tarde y mete el acelerador en el último tercio de la curva para salir con buena tracción; sin embargo, sacrifica velocidad», explicó Gerardo González, ingeniero mecánico y especialista en telemetría de NASCAR México Series.
¿Qué tanto se relaciona esta variable con la forma de conducción del tricolor?
«Al elegir el bólido con mayor carga aerodinámica en la parte trasera -de un cien por ciento, se divide en 20 en el alerón delantero, 30 en el centro y 50 en el área de la suspensión posterior- va pegada al suelo y provoca subviraje. Nuevamente entra el freno porque el camino que toma la curva es más amplio. Con el morro suelto, la frenada se alarga con suavidad y controla el monoplaza, pero sacrifica, en algunas ocasiones, la velocidad.
«A Checo jamás le ha gustado el estilo de Max Verstappen de llevar más peso en la parte delantera. Si lo vemos desde el punto de vista de la física, cuando tú llegas a una frenada, la parte de atrás estará suelta, inestable y se te va. Las veces que al mexicano le dan un bólido con estas características lo vemos corrigiendo con el volante».
Ese pequeño detalle es el que ayuda al conductor de Red Bull a brillar en lugares como Azerbaiyán, Arabia Saudita, Mónaco, Singapur o Las Vegas, pero que lo hace sufrir en Japón, Monza y Bélgica.
Debe ser mejor
Checo es muy bueno frenando, pero Max lidia con las curvas más rápido.
¡A vencer a Max!
Aquí tres puntos que el piloto tapatío de Red Bull debe mejorar para vencer a su coequipero, el tricampeón Max Verstappen:
En Calificación
La temporada pasada, Checo batalló en las sesiones de Calificación por diversos factores. El que se repitió más veces fue el tiempo.
Hugh Bird, el ingeniero de carrera, acostumbra mandar al mexicano muy temprano a la pista sin los neumáticos en la ventana ideal de temperatura.
O también ocurre lo contrario, con 2 minutos en el crono intenta marcar una sola vuelta rápida que no le funciona porque los rivales mejoran y lo desplazan, además, por la presión del tiempo comete errores y accidentes que salen caros.
La estrategia a seguir debe ser casi idéntica a la de Max Verstappen.
Short shifting
El Sergio Pérez que manejaba el Racing Point tenía un mayor control del desgaste de neumáticos que el Checo de Red Bull.
Antes, el tapatío alargaba la vida de sus llantas gracias al cambio que hacía de la marcha sin alcanzar todas las revoluciones, lo que daba como resultado menos giros en las ruedas y evitaba los derrapes.
No obstante, la aceleración era tardía, porque las llantas no lograban la tracción óptima con el asfalto a la hora de pisar a fondo.
Los ajustes que hizo desde el 2021 con el Red Bull le permitieron ser más agresivo, con un uso excesivo del freno, a cambio de soltar el control del desgaste de las ruedas.
Arrancadas
Cuando las luces del semáforo se apagan, Checo ha tenido diferentes reacciones.
En México tuvo una perfecta al pisar el acelerador y emparejarse con los líderes pese a salir quinto en la parrilla.
La situación falló al atorarse con el aletín y el neumático delantero derecho del Ferrari de Charles Leclerc… y tuvo que abandonar la carrera.
Hay otras ocasiones en las que sus reflejos fallan, como en el GP de Brasil, donde fue cazado por Lewis Hamilton y su Mercedes de manera inmediata.
«Los reflejos se ejercitan mucho, al igual que la concentración. Algunas veces observamos que trabajan con pelotas dejándolas caer y atrapándolas rápidamente, que los mantiene en un estado de alerta», señala Gerardo González, ingeniero mecánico y especialista en telemetría de NASCAR México.
