Con el reciente triunfo de David Benavidez sobre Demetrius Andrade el pasado sábado, el nombre de Saúl ‘Canelo’ Álvarez volvió a resaltar casi de manera natural, ya que todo el mundo quiere ver un encontronazo entre el de Phoenix, Arizona y el jalisciense, quien presume cada que puede ser el mejor boxeador libra por libra del planeta
Al parecer, todos menos el mexicano quieren a Benavidez como el próximo rival, una prueba de verdadero fuego de la que ha escapado mágicamente en por lo menos los últimos dos años y también parece que el destino ya alcanzó al pelirrojo.
Se dice que de no aceptar la pelea con el que ya fue clasificado como ‘retador oficial’ por el presidente de la Comisión Mundial de Boxeo, Mauricio Sulaimán, el ‘Canelo’ tendría que ser despojado de su título de los Súpermedianos, algo que leyendas de la talla de Juan Manuel Márquez apoyan sin chistar.
“QUIERE QUE VOLTEEN A VERLO”
Sin embargo, hay quienes siguen defendiendo lo indefendible, tanto en medios de comunicación como en el mundo del boxeo y uno de ellos está en la esquina del púgil mexicano, ni más ni menos que su mánager, Chepo Reynoso, quien declaró al periodista de Azteca Deportes, David Medrano, que básicamente todos los que buscan al ‘Canelo’ es por dinero.
“Todos quieren gritar, porque eso significa dinero. Lo mismo que pasaba con Óscar de la Hoya. Nos decía Rafael Mendoza: ‘El que pelee con de la Hoya se sacó la lotería’, te valga madre cómo quede. Si vamos a hablar de Saúl, que cualquier peleador, un Benavidez que no sé lo que gana, ni me interesa, a lo mejor gana uno o dos millones de dólares por pelea, a lo mejor acá va a ganar 10. Pues yo le voy a decir que es miedoso. Lo que quieren es que volteen a verlo” dijo convencido el mánager que afirma que ‘Canelo’ es su mejor ‘creación’.
El resto de la entrevista, promete, pero el propio Medrano emplazó su difusión a este jueves 30 de noviembre.
Lo cierto es que el famoso ‘Bandera Roja’ no es ningún oportunista y los allegados al Canelo deben medir sus palabras, pues el jalisciense podría estar vislumbrando el más grande reto de su carrera ante un púgil que pretende demostrarle que su historia no es tan infalible como ha pretendido venderla.