La posibilidad de que el príncipe Harry y Meghan Markle pasen la Navidad con la Familia Real ha sonado en los medios británicos en semanas recientes. Sin embargo, este escenario –que permitiría al rey Carlos III pasar tiempo con sus nietos, los príncipes Archie y Lilibet– podría no concretarse debido a nuevos obstáculos que enfrentaría la relación entre los duques de Sussex y la familia del monarca británico.
Las revelaciones que han llegado a la prensa hasta ahora del libro Endgame, en el que el periodista Omid Scobie hace un balance actual de la Familia Real británica y su “lucha por la supervivencia”, parecen mostrar que cada vez son menores las esperanzas de que haya un acercamiento entre los Windsor y los Sussex.
Por ello, la celebración de la Navidad este año podría ser crucial para que el rey Carlos III logre reencontrarse con su hijo menor y sus nietos, y dar una señal de buena voluntad al pueblo británico (y a los medios del mundo) con la que muestre que la Familia Real puede resolver sus asuntos privados como cualquier otra familia.
Pero, gracias al texto de Scobie, no sólo se han reforzado las circunstancias que marcan la tensión entre el rey y la familia de Harry, como la rivalidad entre Meghan Markle y la princesa Kate Middleton, y el evidente desprecio que príncipe William siente por su hermano. Además, el libro afirma que los príncipes de Gales se han burlado de los Sussex y que el propio monarca británico se ha expresado mal del príncipe Harry.
Aunque muchas son las voces que señalan que el rey de Inglaterra desea estar en contacto con sus nietos, Archie y Lilibet, y para ello debe buscar acercarse con su hijo menor, en Endgame se dice que el propio Carlos III ha hablado mal del príncipe Harry y lo ha llamado “ese tonto”, luego de todas las revelaciones que el duque de Sussex hizo sobre las diferencias existentes entre su familia y la Familia Real en el documental que protagonizó junto a Meghan Markle para Netflix, según publica Vanitatis.
De acuerdo con Vanity Fair España, una de las principales afirmaciones del libro pinta un retrato muy poco favorecedor del príncipe William, a quien se describe como “una figura fría y despiadada que se muere de ganas de ascender al trono” y que a diferencia de Carlos III, quien según esto “lidera con la cabeza y con el corazón”, el príncipe de Gales “es más frío” y su prioridad es que el trabajo salga adelante y no tiene problemas con las “bajas” que haya en el camino, por lo que la ausencia de Harry no parecería representar ningún problema para él.
La monarquía es una institución en crisis que debe cambiar para sobrevivir. Esa es la premisa sobre la que se construye el relato de Endgame, el nuevo libro del periodista Omid Scobie, quien es el co-autor del libro Finding Freedom, en el que se realiza un retrato del príncipe Harry y Meghan Markle y las circunstancias que los llevaron a alejarse de la Familia Real británica.
“La muerte de la reina Isabel II rompió los cimientos ya fracturados de la Casa de Windsor y desmanteló el escudo protector que la rodeaba. Con una institución plagada durante mucho tiempo por ideas anticuadas sobre raza, clase y dinero, la monarquía y quienes la sostienen ahora están expuestos y en desacuerdo con un mundo que se moderniza rápidamente”, se lee en la ficha informativa que acompaña al libro, cuyos adelantos ya han dado mucho de qué hablar en los medios británicos y la prensa internacional.
El texto, en el que se habla de “un rey impopular, un heredero al trono hambriento de poder, una reina dispuesta a hacer todo lo posible para preservar su imagen y un príncipe obligado a comenzar una nueva vida después de ser traicionado por su propia familia”, está basado en la experiencia de Scobie como reportero de la realeza y en más de una década de conversaciones y entrevistas con empleados actuales y ex trabajadores del Palacio de Buckingham. Asegura también que ha hablado con amigos de confianza de la realeza e incluso con los propios miembros de la familia.