La cantante recibió críticas mediante redes sociales por su equivocación frente a miles de personas.
La cantante mexicana María León fue blanco de críticas en redes sociales por equivocarse durante la interpretación del Himno Nacional de México en un juego entre los Padres y Los Gigantes de las Grandes Ligas.
León se encontraba frente a miles de personas en el estadio Alfredo Harp Helú cuando sucedió el vergonzoso momento que rápidamente se difundió en redes sociales provocando burlas y enojo entre usuarios, quienes consideraron que fue una falta de respeto que no se aprendió el himno nacional de su propio país.
¿Cuál fue el error? La interprete cantó; “un soldado de Dios escribió”, cuando lo correcto debió ser “por el dedo de Dios se escribió”.
En redes sociales usuarios recordaron a otros cantantes que se equivocaron en el Himno Nacional como; Ana Barbara, Jenny Rivera, Vicente Fernández, Coque Muñiz y Luis Ramírez, mismos con los que María León se integra a la lista.
Hubo personas que pidieron perdón por María León, pues consideraron que solo se equivocó “tantito” aunque por otro lado hubo quienes fueron duros, criticaron su falta de preparación o nerviosismo; “Qué pena María León”, “María León está como los jugadores de la selección mexicana!! A eso se dedican y no hacen bien su trabajo”, comentaron.
Luego del escándalo, María León emitió un mensaje mediante su cuenta de Twitter, donde admitió que la traicionaron los nervios ante la audiencia del estadio Alfredo Harp Helú.
Con el dolor de mi corazón pido una enorme disculpa por equivocarme en nuestro Himno Nacional. Lo he cantado mil veces, lo he estudiado hasta el cansancio pero el día de hoy ante un escenario tan imponente, me traicionaron los nervios y el latido de mi corazón. No hay excusa”, escribió la intérprete de «El eco de tu voz».
Maria Leon:
Con el dolor de mi corazón pido una enorme disculpa por equivocarme en nuestro Himno Nacional.Lo he cantado mil veces, lo he estudiado hasta el cansancio pero el día de hoy ante un escenario tan imponente, me traicionaron los nervios y el latido de mi corazón. No hay excusa.