La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) ordenó a hospitales el retiro de ventiladores de la marca Philips modelo E30, tras una demanda colectiva contra dispositivos defectuosos.
43 personas interpusieron una demanda colectiva en contra de la empresa Philips México Comercial, SA de CV, por los ventiladores que México adquirió en 2020 para enfrentar la pandemia de COVID-19.
No obstante, en 2021, la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) alertó que ese modelo y otros estaban defectuosos, por lo que debían dejar de utilizarse.
En la lista de los equipos a retirar, la Cofepris también incluyó los modelos BiPAP V30, BiP A30/A40 y Bi-Level PAP, que también fueron descalificados por la FDA, aunque no hay evidencia de que los haya en el país.
La falla.
Reportes médicos en países donde suspendieron el uso de los ventiladores Philips, las fallas de los equipos estaban en la espuma utilizada para el aislamiento acústico y en los sistemas de calibración.
Esto último implicaba el riesgo de que liberaran partículas tóxicas, se afectaran los parámetros de oxigenación e incluso que los aparatos se apagaran de forma inesperada.
