En abril, el Comité de Dirección de Orlegi Sports anunció a Aníbal Fájer como nuevo presidente deportivo del Atlas, tras la destitución de Germán Brunati.
En esta nueva era de La Academia, el joven directivo busca despertar a uno de los equipos más tradicionales del futbol mexicano y convertirlo en competitivo.
Fájer confesó que los principales objetivos al frente de los Zorros serán “el éxito deportivo en nuestros primeros equipos, tanto varonil como femenil, la formación de talento y la sostenibilidad financiera”.
Aníbal tomó las riendas del club antes de que Orlegi Sports anunciara el inicio del proceso para la venta del Atlas, el cual inició
hace un par de semanas.
Bajo la administración del grupo presidido por Alejandro Irarragorri, los rojinegros rompieron la sequía de 70 años sin títulos, nada más y nada menos que con un histórico bicampeonato, pero desde entonces, los Zorros jugaron solamente una vez la
Liguilla (seis torneos), con cuatro ausencias consecutivas y el pago de 33 millones de pesos como multa por ocupar los últimos lugares en la tabla de cocientes en el más reciente torneo.
“La puerta estaba para empezar una era, pero no hicimos lo necesario para entrar. Nos quedamos dormidos y eso resultó en
que esa puerta que se abrió… No entramos a una etapa en la cual Atlas pueda ser el que merece su afición, que compite y es protagonista”, afirmó.
Consciente de ser la cabeza de una institución reconocida por la formación de futbolistas, le prometió a la afición que “vamos
a trabajar muy intensamente, enfocados a detalle para ser dignos de tener mejores resultados, pero sobre todo que se sientan orgullosos de ser del Atlas, de ponerse su camiseta y platicar que son aficionados de este club, porque lo que ven en la cancha, los refleja como personas”.
