En una noche inolvidable para el béisbol, Cal Raleigh escribió su nombre con letras doradas al convertirse en el primer receptor en la historia en ganar el Home Run Derby, al imponerse en la edición 2025 celebrada este lunes como parte del All-Star Week de las Grandes Ligas.
El catcher de los Marineros de Seattle avanzó de manera agónica a la segunda ronda —por menos de una pulgada de ventaja— y luego no soltó el bat hasta consagrarse como campeón. Primero superó al dominicano Oneil Cruz, uno de los favoritos por su poder descomunal, y más tarde derrotó en la final a su compatriota Junior Caminero, quien se quedó sin tiempo ni lanzamientos para igualar el marcador durante el tiempo extra.
Para Raleigh, de 27 años, esta victoria representa la culminación de una temporada de ensueño. El bateador ambidiestro lidera las Grandes Ligas con 38 jonrones antes de la pausa del Juego de Estrellas, una cifra solo superada en la historia por Barry Bonds, quien sumó 39 en el 2001.
El nativo de Carolina del Norte se une también a la leyenda Ken Griffey Jr. como los únicos jugadores de los Marineros en ganar el Derby. Griffey, con tres títulos, mantiene el récord histórico del evento, pero ahora Raleigh se suma como el primer receptor y primer bateador ambidiestro en llevarse el título en la competencia de jonrones más emblemática del calendario.
Además del trofeo, la noche refuerza el gran año de Raleigh, quien debutará como receptor titular en el Juego de Estrellas representando a la Liga Americana este martes. Su actuación consolida su estatus no solo como uno de los mejores cañoneros de la actualidad, sino también como una figura clave en la nueva generación de peloteros estelares.
Con su nombre ya en los libros, Cal Raleigh no solo ganó el Derby: hizo historia.
