En un giro inesperado, los Atléticos de Oakland, conocidos por ser uno de los equipos más «austeros» de la MLB, han invertido más de 150 millones de dólares en talento este invierno.
Entre los movimientos destacados se encuentran la contratación del dominicano Luis Severino, quien se convertirá en el ancla de la rotación del equipo con un contrato de dos años y una opción para un tercer año que podría alcanzar los 67 millones de dólares, el contrato más grande en la historia de la franquicia.
Además, los Atléticos también firmaron al tercera base colombiano Gio Urshela, al relevista dominicano José Leclerc y renovaron con el zurdo T.J. McFarland. También adquirieron al zurdo Jeffrey Springs en un cambio con los Rays y le otorgaron una extensión de contrato al bateador designado Brent Rooker con un acuerdo de cinco años y 60 millones.
La camada internacional del equipo también se vio reforzada con la incorporación de la estrella japonesa Shotaro Morii, capaz de jugar como bateador y lanzador, quien recibió un bono al firmar de 1.5 millones, el más grande de la historia para un amateur japonés fuera del Beisbol Profesional Nipón.
Es importante destacar que los Atléticos jugarán dos temporadas (cuando menos) en Sacramento, California, mientras se construye su nuevo estadio en Las Vegas.