Roncar puede parecer algo normal, pero en realidad es una señal de que el aire no está pasando bien por la garganta mientras dormimos.
Esto ocurre cuando los tejidos de la garganta vibran por el paso forzado del aire, lo que genera ese sonido tan común mientras se duerme.
Los ronquidos frecuentes pueden afectar el descanso y ser señal de problemas más serios, como pausas en la respiración durante el sueño, cansancio todo el día, dolor de cabeza al despertar o incluso presión alta. Si estos síntomas aparecen, es importante ir al médico.
Hoy en día muchas personas no logran dormir bien por el trabajo, el uso del celular o las preocupaciones. Y si hay alguien roncando cerca, el descanso puede ser aún más complicado.
Algunas de las causas más comunes del ronquido son el sobrepeso, consumir alcohol antes de dormir o tener el tabique desviado. Para mejorar, se recomienda bajar de peso, evitar bebidas alcohólicas, dormir de lado, hacer ejercicio y cuidar los horarios de sueño.
Además, un alimento natural como la miel puede ser un buen aliado. Gracias a sus propiedades antiinflamatorias, ayuda a mantener las vías respiratorias despejadas y a calmar la garganta, lo que puede reducir los ronquidos.
Tomar una cucharadita de miel antes de dormir podría ayudarte a descansar mejor y con menos ruidos.
