Carlos Zamarripa Aguirre, apodado como el «fiscal eterno» por el expresidente Andrés Manuel López Obrador, dejó su cargo tras ocuparlo por más de 15 años.
Zamarripa Aguirre realizó voluntariamente su renuncia, aunque su cargo expiraba hasta 2028, en tres años.
Desde el 27 de septiembre ya había presentado su dimisión, aunque la misma se efectuó el 1 de enero de este 2025.
Ante ello, la gobernadora de Guanajuato, Libia Dennise García Muñoz Ledo, aseguró que «viene una nueva etapa para la Fiscalía General del Estado» y presentó a la fiscal provisional, Zucé Anastasia Hernández.
Antes de irse, Carlos Zamarripa Aguirre realizó modificaciones al Reglamento interior de la Fiscalía General del Estado para autoasignarse pensiones económicas para él y para su personal de confianza.
Entre los cambios, uno de ellos es que reciba una pensión vitalicia de más de 147 mil pesos mensuales.
El «fiscal eterno» fue nombrado en el cargo desde 2009 y se mantuvo extendiendo su puesto en los gobiernos de Juan Manuel Oliva Ramírez, Miguel Márquez Márquez y Diego Sinhue Rodríguez Vallejo.