Trascendió que el Gobierno del Reino Unido no reconocerá el nombre de “Golfo de América” decretado por Trump y seguirá llamándole Golfo de México. Esto sería importante, pues los británicos son de los principales aliados geopolíticos de Estados Unidos.
Dio a conocer The Telegraph que al interior del gobierno británico definieron que no van a llamar “Golfo de América” al Golfo de México, pese al decreto presidencial de Trump de hace unos días.
Aunque acota el medio inglés que el país europeo seguirá con el nombre histórico a menos de que empiece a ganar popularidad en el idioma inglés el uso del nuevo nombre, con el paso del tiempo.
Esto significa que en los mapas oficiales británicos seguirá apareciendo el cuerpo de agua como “Gulf of Mexico”.
Anticipan que no se volverá muy popular el nombre que plantea Trump, al menos en el corto plazo.
Una fuente consultada por dicho diario dijo que “el nombre no puede ser universalmente cambiado por solamente un país” y “no aplicará para productos del Reino Unido”.
Refiere la publicación que este renombramiento posiblemente provoque controversia en la ONU, tal como sucede con otros lugares.
Menciona el caso específico de las “Islas Malvinas”, las cuales Reino Unido reclamó como suyas tras una guerra con Argentina, pero que renombró el gobierno británico como “Falkland Islands” y de hecho la ONU las reconoce como “Falkland Islands”, aunque entre paréntesis suele poner “Malvinas”.
El Golfo es de México, EE.UU. y Cuba.
Legalmente sí se llama “Gulf of America” pero solo la plataforma continental que le pertenece a Estados Unidos, dentro de los límites fijados por el derecho marítimo internacional.
La parte que se llama así corresponde al pedazo que está en la costa de Texas, Luisiana, Misisipi, Alabama y Florida, todos de Estados Unidos, pero se limita al punto donde empiezan las aguas territoriales de México y las de Cuba.
Pero eso es solo como uso legal para el interior de Estados Unidos. El golfo completo se sigue llamando Golfo de México, no solo para México sino que para el resto del mundo.
El nombre tiene unos cuatro siglos de historia y para México sus aguas podrán llamarse como lo establezca el gobierno.
La única cuestión es el nombre internacional, pues Estados Unidos es el país más influyente del mundo y con sus lazos diplomáticos podría buscar que las demás naciones le llamen así.
La Organización Hidrográfica Internacional, en su publicación oficial conocida como ‘Límites de los Océanos y los Mares’, reconoce formalmente el nombre de Golfo de México en su idioma original.
