El futuro de los Rays de Tampa Bay podría tomar un giro radical. Un grupo de inversionistas con base en Orlando ha presentado un ambicioso proyecto para trasladar la franquicia a su ciudad, incluyendo la construcción de un estadio de Grandes Ligas y un complejo turístico de primer nivel con un valor estimado de 1.5 billones de dólares.
Barry Larkin, miembro del Salón de la Fama y ex jugador de los Rojos de Cincinnati, ha sido presentado como embajador del proyecto, lo que añade peso e imagen a la propuesta.
El plan no solo busca atraer béisbol de Grandes Ligas a Orlando, sino convertir el nuevo recinto en una atracción más dentro del panorama turístico de la ciudad.
Mientras tanto, la situación en Tampa sigue siendo incierta. Los Rays actualmente disputan sus juegos en el campo de prácticas de los Yankees en el complejo de Spring Training de Tampa, un lugar que claramente no está diseñado para albergar una temporada completa de MLB.
Las negociaciones para un nuevo estadio en Tampa llevan años sin concretarse, lo que hace que la oferta de Orlando suene cada vez más tentadora tanto para la franquicia como para la MLB. Aún no hay una decisión oficial, pero el reloj corre y el cambio de sede podría pasar de rumor a realidad.
