El fiscal general de justicia de Tamaulipas, Irving Barrios Mojica, confirmó este martes que los cinco integrantes del grupo musical Fugitivo, desaparecidos desde el 25 de mayo, fueron asesinados y sus cuerpos calcinados en un horno de una ladrillera ubicada en la colonia Aquiles Serdán.
Ese día, alrededor de las 8 de la noche, un hombre identificado como Dino Andrés “N”, apodado “Din”, contactó por teléfono al representante de la banda para contratarlos en un supuesto evento privado en la colonia Riveras de Rancho Grande.
Los músicos se reunieron en una casa de la colonia Reservas Territoriales y salieron en la camioneta del grupo. Cámaras de vigilancia los captaron circulando en la ciudad y siguiendo una camioneta gris. Después de las 10:20 de la noche ya no se supo más de ellos.
Las investigaciones indican que fueron interceptados por hombres armados que los obligaron a bajar de su vehículo y subir a otra camioneta, la misma que más tarde fue encontrada por las autoridades.
El 29 de mayo, durante un operativo en un basurero clandestino de la colonia Aquiles Serdán, policías fueron atacados por hombres armados. En ese operativo, 9 personas fueron detenidas y se aseguraron armas y dos vehículos, uno de ellos la camioneta gris.
Gracias a las declaraciones de los detenidos, se supo que los músicos fueron llevados a una ladrillera, donde fueron asesinados y luego quemados en un horno. Los restos fueron arrojados a unos 300 metros del lugar.
La Fiscalía de Tamaulipas ya logró identificar a tres de las víctimas gracias a pruebas de ADN. Los demás fragmentos óseos siguen siendo analizados con apoyo de la Fiscalía General de la República y el Centro de Investigación Criminal.
Las autoridades continúan con las investigaciones y hay al menos 12 personas detenidas relacionadas con el caso.
