Juega, diviértete y haz ejercicio.
Con un aro trabajarás todo el cuerpo, principalmente abdomen, cintura, piernas, brazos, hombros y cuello en una clase de hoop fit, mientras que en una sesión de hoop flow aprenderás a bailar con la música haciendo diferentes trucos.
«Hoop fit es enfocada al cardio y el trabajo depende de la intensidad que le imprima cada quien. Hacemos trabajos con el hula en la cintura, al mismo tiempo estamos haciendo desplantes. Siempre se trabajan mínimo dos partes del cuerpo a la vez, normalmente más.
«Y Hoop flow es más enfocada a bailar y a hacer un poco más creativos con el Hula, se aprende a hacer trucos, ilusiones y bailar, también se hace un poco de cardio», explica Fernanda Ramírez, Instructora de Hoop Fit y Hoop Flow, certificada por la empresa Hoopnotica de Los Ángeles, California.
Para una clase de hoop fit se usan los hulas más anchos, pesados y grandes para que tengas más espacio al momento de dar vueltas y para una clase de flow se trabaja con los hulas chicos y ligeros que te ayuden a hacer trucos y así no te canses ni te lastimes.
«Desde la primera clase puedes aprender cuatro o cinco trucos, se ven muy difíciles cuando los ves, pero ya cuando los haces paso a paso son en realidad fáciles y la gente puede hacerlos», comenta Ramírez.
Utilizar el hula tiene enormes beneficios físicos, trabajas cardio, fortaleces el cuerpo, ayudas a tu flexibilidad y quemas calorías, además, mentalmente te ayuda a conseguir un estado de ánimo positivo.
«Te ríes toda la clase y disfrutas más hacer ejercicio, además te ayuda a socializar. Hay que aprender a divertirse, a todos se nos va a caer el hula, nos vamos a equivocar en algún punto, pero hay que intentarlo, se vuelve una adicción, no paras y te ríes mucho», asegura.