Innumerables estudiantes universitarios han realizado el experimento: ¿Qué sucede cuando se mezclan alcohol y cannabis?
Pero pocos lo han hecho en un laboratorio, bajo la atenta mirada de los científicos, calibrando cuidadosamente su respiración mientras inhalan dosis de mariguana de grado experimental.
En un nuevo estudio, los investigadores reunieron a unos 150 adultos en un bar improvisado en el campus de la Universidad de Brown para comprobar cuánto deseaban beber después de fumar cannabis. Se trata de uno de los primeros ensayos rigurosos que examinan cómo afecta la mariguana al consumo de alcohol.
“Este es básicamente un estudio muy cuidadoso y preciso sobre la transición simultánea a la euforia y el consumo de cannabis”, dijo el Dr. James MacKillop, director del Centro Michael G. DeGroote para la Investigación del Cannabis Medicinal de la Universidad McMaster y uno de los autores del estudio. (La transición simultánea a la euforia y el consumo de cannabis implica estar bajo los efectos de ambas sustancias al mismo tiempo).
Los investigadores descubrieron que las personas bebían considerablemente menos después de fumar cannabis.
El nuevo estudio, publicado el miércoles, llega en un momento en que la tendencia de consumir cannabis sin alcohol, como mariguana u otras drogas, se ha vuelto popular. Los investigadores atribuyen su popularidad a la creciente legalización y disponibilidad del cannabis en diversas presentaciones, incluyendo comestibles y bebidas preenvasadas , así como a una mayor conciencia sobre los efectos nocivos del alcohol para la salud .
“Con demasiada frecuencia estudiamos las drogas de forma aislada”, afirmó Ryan Vandrey, profesor de psiquiatría y ciencias del comportamiento en Johns Hopkins Medicine, quien estudia el cannabis y no participó en la nueva investigación. Pero en realidad, añadió, es común que la gente combine alcohol y cannabis.
“No lo entendemos bien”, dijo. “Y creo que lo necesitamos”.
Los investigadores reclutaron a 157 personas que consumen cannabis y alcohol con regularidad. El experimento se llevó a cabo en tres rondas, con días de diferencia entre cada una. Durante una sesión, los participantes fumaron porros con una mayor concentración de THC, el compuesto psicoactivo del cannabis. En otra sesión, fumaron cannabis con menor concentración de THC, y en una tercera, fumaron un porro placebo.
El consumo de cannabis fue controlado; los participantes siguieron un “procedimiento de inhalación a ritmo constante” estandarizado, escuchando una grabación de audio que les indicaba cuándo inhalar y exhalar.
Tras fumar, pasaron a un laboratorio ambientado como un bar, decorado con luces de guirnalda y carteles de Guinness y Jack Daniel’s. El bar estaba provisto de las bebidas preferidas de los participantes. Los investigadores observaron a través de un espejo unidireccional cómo los participantes decidían si querían tomar una copa.
El día que fumaron cannabis con mayor contenido de THC, los participantes bebieron aproximadamente un tercio menos que el día que fumaron el porro placebo. Tras fumar cannabis con menor contenido de THC, consumieron alrededor de un veinte por ciento menos de alcohol que cuando utilizaron el placebo.
A pesar de las conclusiones del estudio, es demasiado pronto para afirmar con certeza que el cannabis puede reducir el consumo de alcohol, dijo Jane Metrik, profesora de ciencias sociales y del comportamiento en la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Brown y autora principal del artículo.
Y debido al alto grado de control del estudio, es posible que los resultados no sean directamente aplicables a la vida cotidiana. Los productos de mariguana más comunes suelen contener mucho más THC que incluso la dosis más alta utilizada en el ensayo, afirmó Johannes Thrul, profesor asociado de la Escuela de Salud Pública Bloomberg de Johns Hopkins, quien no participó en el estudio. (Como en muchos otros estudios, los científicos obtuvieron el cannabis de un suministro nacional destinado específicamente a la investigación ) .
Con la llegada al mercado de variedades de cannabis más potentes, los investigadores buscan con avidez más datos sobre cómo podría interactuar esta droga con el alcohol. Aún se desconocen muchos aspectos sobre los efectos combinados del alcohol y la mariguana en la salud: cómo actúan estas sustancias en el organismo; cómo se mezclan los distintos compuestos del cannabis con el alcohol; y si fumar, ingerir o beber mariguana modifica su interacción con el alcohol.
“En última instancia, serán estos estudios de laboratorio rigurosamente controlados y la evidencia del mundo real los que, en conjunto, nos permitan comprender la situación”, afirmó el Dr. Thrul. “Porque ninguno de estos estudios por sí solo puede responder a estas preguntas”.
