Guillermo Ramírez Gutiérrez, diputado del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y presidente del Congreso del Estado, hizo un llamado al sector agropecuario para velar por la unidad en vísperas del 25 de octubre, fecha límite para el trasvase a Estados Unidos que marca el Tratado Internacional de Aguas de 1944.
En entrevista a medios de comunicación, el legislador fue cuestionado por su postura en torno a las declaraciones de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, quien anunció el acuerdo entre los gobiernos de Chihuahua, Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas para entregar el recurso hídrico faltante a territorio estadounidense.
De acuerdo con la información que dio a conocer la mandataria, las cuatro entidades federativas aportarían el recurso hídrico de forma progresiva, en aprovechamiento de la captación que han registrado los cuerpos de agua desde junio, cuando inició la caída de lluvia en distintas regiones de Chihuahua.
En tal sentido, Ramírez Gutiérrez mencionó: «Saben que Chihuahua tiene muchos años con una crisis hídrica tremenda. Yo creo que el Tratado de 1944 es un Tratado que tiene ya muchos años, que debería ser un tema de una modernización real. […] La semana pasada se presentaron todavía algunas lluvias. El período de aguas está por terminar o está ya terminado».
A juicio de Ramírez Gutiérrez, el trasvase debería llevarse a cabo en consideración del volumen de las principales presas, pues, aunque las precipitaciones han aumentado su nivel, Chihuahua atraviesa desde los últimos años por una sequía marcada, que hasta mayo imperaba en la mayoría de los 67 municipios.
«Tendríamos que que estar nosotros los chihuahuenses muy unidos. Porque es un tema que involucra a muchos sectores ganaderos, agrícolas. Mucha sociedad civil está sensible en este tema. […] Había que ver el análisis real de todos los escurrimientos, que ver el el tema de cuánta agua se juntó y se captó», dijo.
El acuerdo
El Gobierno de México acordó abrir entre mayo y octubre las compuertas de tres presas en el país, entre ellas la presa El Granero, conocida también como la presa Luis L. León y ubicada en el municipio de Aldama, para trasvasar a Estados Unidos el recurso hídrico faltante que marca el Tratado Internacional de Aguas de 1944.
El acuerdo, que generaron autoridades mexicanas y estadounidenses el 28 de abril, establece que, además de El Granero, la Presa Internacional La Amistad, en Coahuila; el Río San Juan, que cruza Nuevo León y Tamaulipas; y seis tributarios mexicanos del Río Bravo habrán de pagar entre 400 y 518 millones de metros cúbicos.
El volumen será entregado a más tardar el 24 de octubre de 2025, un día antes de concluir el quinquenio actual que establece el Tratado de Aguas. El Gobierno refiere que el trasvase no compromete el ciclo agrícola, ni el suministro de agua potable para consumo humano en ninguna entidad federativa.
INFORMACIÓN DE TIEMPO.COM.MX
