Después de varias semanas de especulación, Sergio Ramos rompió el silencio y confirmó que su etapa en el futbol mexicano ha llegado a su fin. La declaración ocurrió inmediatamente después de la eliminación de Rayados en las semifinales del Apertura 2025, a manos del Toluca.
El zaguero español, uno de los fichajes más mediáticos en la historia reciente de la Liga MX, fue cuestionado por TUDN sobre si había disputado sus últimos minutos con Monterrey.
Con firmeza, el campeón del mundo en Sudáfrica 2010 despejó cualquier duda: “Sí, es mi último partido”, afirmó, recordando que días antes ya había adelantado su decisión.
El contrato del defensor con el club regiomontano concluía en diciembre, y Ramos confirmó que no será renovado. Su paso por La Pandilla duró menos de un año, tiempo en el que participó en dos torneos, sumó 33 partidos, anotó ocho goles y portó el gafete de capitán en distintos encuentros.
Pese a su corta estancia, el excapitán del Real Madrid dejó una marca estadística: se convirtió en el futbolista más veterano en anotar en una Liguilla, con 39 años y 251 días.
En su despedida, Ramos lamentó la forma en que Monterrey quedó eliminado. Señaló que el equipo “regaló” la primera mitad del partido, careciendo de intensidad, ritmo y personalidad, aunque destacó la reacción mostrada en la parte complementaria.
“Siempre duele perder una semifinal y quedarnos a la puerta de una final… se puede perder, pero se pierde como jugamos la segunda parte”, sentenció en lo que fue su última declaración como jugador del Monterrey.







