La promesa electoral de una deportación masiva durante la gestión de Donald Trump resuena entre las escuelas de Estados Unidos.
Por ello, distintas casas de estudio en territorio norteamericano han empezado a prepararse para dicho escenario.
Tal es el caso de la Universidad de Massachusetts Amherst, que a través de su Oficina de Asuntos Globales ha recomendado a su comunidad internacional bajo esquemas de inmigración a regresar a EU antes del 20 de enero de 2025, fecha de la Inauguración Presidencial, en caso de viajar internacionalmente durante las vacaciones invernales.
«(La oficina) emite este aviso como medida cautelar para prevenir, con suerte, cualquier posible interrupción en los viajes de los miembros de nuestra comunidad internacional», se lee en un comunicado de la institución educativa.
«No podemos especular sobre cómo será la prohibición de viaje si se promulga, ni podemos especular sobre qué países o regiones del mundo en concreto podrían verse o no afectados».
Por su parte, los directivos de la red universitaria del Estado de California informaron a través de un comunicado compartido que sus centros educativos seguirán comprometidos con los valores de diversidad e inclusión y, por tanto, apoyarán y protegerán a los miembros de sus respectivas comunidades.
«El alumnado matriculado en la UC (Universidad de California) debe saber que existen políticas vigentes para proteger los derechos de todos los estudiantes, independientemente de su estatus migratorio», declaró el Centro de Leyes y Políticas de Inmigración (CILP) de la Facultad de Derecho de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) en su sitio web.
«(Además, la UC) no divulgará el estado migratorio o información relacionada en los registros confidenciales de los estudiantes sin una orden judicial, una citación, una orden de la corte o cualquier otra forma requerida por la ley».
Al respecto, la entidad educativa también señaló que por una política de la universidad la policía del campus generalmente no puede realizar esfuerzos conjuntos con las autoridades federales de inmigración ni detener personas a pedido del gobierno federal.
De forma similar, Michael S. Roth, presidente de la Wesleyan University, dio a conocer en un comunicado que la institución hará todo en su poder para proteger a su comunidad.
«Wesleyan permanecerá comprometida con los principios de no discriminación, incluida la igualdad de protección ante la ley, independientemente del origen nacional o la ciudadanía», enfatizó.
«La universidad no colaborará voluntariamente en ningún esfuerzo del gobierno federal para deportar a nuestros estudiantes, profesores o personal únicamente por su estatus de ciudadanía. Hoy el trabajo para defender a los más vulnerables nunca ha sido más importante».
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