Con el ciclo agrícola retrasado, pues debía haber comenzado el primero de marzo, las presas más importantes de la entidad tienen hasta dos tercios menos agua de la que tenían almacenada hace un año, mientras que el promedio general de llenado cayó en los últimos meses de 78 a 46 por ciento.
Las presas con el menor nivel de almacenamiento son El Tintero y Las Lajas, que ayer reportaban 12 y 16 por ciento de llenado, de acuerdo con el monitoreo diario que realiza la Comisión Nacional del Agua (Conagua) de todos los embalses del país.
Las Lajas, de la corriente del río Santa Clara en el municipio de Buenaventura, tiene una capacidad de almacenamiento de 83.27 hectómetros cúbicos (hm3) y El Tintero, en el mismo municipio, pero ubicada en la corriente del río Santa María, puede contener hasta 125 hm3. Sin embargo, tienen un bajo nivel, inferior al 94 y al 65 por ciento que tenían, respectivamente, el cuatro de marzo de 2023.
La presa más importante de la entidad, La Boquilla, ubicada en el municipio de San Francisco de Conchos en la corriente del río Conchos, tiene una capacidad de almacenamiento total de dos mil 846.78 hectómetros cúbicos (hm3), pero su nivel actual es del 38 por ciento, la mitad del 77 por ciento que tenía en la misma fecha del año pasado.
La siguiente presa en importancia del estado es la Francisco I. Madero o Las Virgenes, ubicada en el municipio de Rosales para captar la corriente del río San Pedro; ayer era reportada con un 33 por ciento de llenado, un tercio del 99 por ciento que tenía el año pasado en estas mismas fechas.
La presa El Granero o Luis L. León, también de la corriente del Conchos, pero en los límites del municipio de Aldama, tiene una capacidad total ordinaria de 284.38 hm3 y su llenado actual es del 97 por ciento, poco menos del 102 por ciento que llegó a captar en marzo del año pasado. Su ubicación aguas abajo de los afluentes del estado es lo que le permite tener un llenado más alto de forma constante que todos los demás embalses de la entidad.
La presa Abraham González, que capta las aguas del río Papigochi en el municipio de Guerrero, tiene apenas el 46 por ciento de almacenamiento, de una capacidad total de 79.35 hm3, pero el año pasado tenía un 93 por ciento en el arranque del ciclo agrícola.
La presa ubicada en el municipio de Allende, Piedras Azules, en la corriente del río Parral, mantiene un 72 por ciento de almacenamiento, igual que el año pasado, pero es de las más chicas de la entidad, con apenas 8.71 hectómetros cúbicos de capacidad.
En tanto, las dos presas ubicadas en la capital del estado, también mantienen niveles relativamente altos, pero son de los embalses pequeños de la entidad. La Chihuahua (corriente del río Chuvíscar) tiene un 61 por ciento, aunque en 2023 tenía un 92 por ciento; y El Rejón (corriente del arroyo El Rejón) mantiene un 87 por ciento, también por debajo del 93 por ciento del año pasado.
El promedio actual de almacenamiento de las presas de mayor importancia en la entidad, que son monitoreadas de manera constante por la Conagua, es del 46 por ciento, pero el año pasado a estas fechas rondaba el 78 por ciento.
Por las presas que son utilizadas para el riego de cultivos en las zonas agrícolas de la entidad, principalmente La Boquilla, fue retrasada la apertura de las compuertas en espera de precipitaciones que pudieran elevar su nivel, razón por la que no ha comenzado la irrigación y el desfogue de agua a los canales de los distritos y módulos de riego, lo que generalmente iniciaba el primer día de marzo.
De acuerdo con información de productores de la región centro-sur de la entidad, el agua disponible puede ser apenas suficiente para el ciclo agrícola de este año, que podría comenzar con la apertura de las compuertas alrededor del 15 de marzo.
INFORMACIÓN DE EL DIARIO DE CHIHUAHUA
