Luis Miguel fue captado en un restaurante en días pasados y fue acusado de arruinar un festejo de cumpleaños al pedirle a los meseros que no grabaran hacía donde se encontraba él.
El cantante pensó que una familia quería invadir su privacidad, así que los meseros les pidieron grabar hacia otro lado.
La mujer a la que Luis Miguel le arruinó el cumpleaños y su hijo están camino a Cancún, pues en esta ocasión se pusieron en contacto con el verdadero equipo del cantante y les regalaron las entradas, pero ya habían caído en un engaño.
Lo anterior, luego de que una persona se pusiera en contacto con ellos, asegurando ser del equipo de Luis Miguel y ofreciéndoles entradas gratis para el concierto en Mérida. Los citó a las 21:00 en el estadio Carlos Iturralde y finalment nunca se les dio acceso.
Los afectados fueron llamados “hambreados”, entre muchas otras cosas por esta situación, por lo que finalmente el equipo real de Luis Miguel se puso en contacto y los invitó al concierto de Cancún.
De acuerdo con lo dado a conocer, Luis Miguel se siente apenado por la situación ya que se dio cuenta que no era su intención arruinar su privacidad.