Aunque el café es una bebida popular y ampliamente consumida entre los adultos, su efecto en los niños es un tema delicado debido a su contenido de cafeína y otros compuestos.
En estos casos, es importante supervisar y moderar el consumo, asegurándose de que no exceda las recomendaciones diarias de cafeína para los niños.
Según Pediatrics, sugieren que los adolescentes de entre 12 y 18 años limiten su consumo de cafeína a 100 mg/día, mientras que la Academia Americana de Pediatría recomienda que los niños menores de 12 años eviten por completo la cafeína, pues los efectos que pueden presentarse son:
Problemas de sueño (dificultad para conciliar el sueño, mala calidad del sueño, somnolencia durante el día)
Adicción a la cafeína y síntomas de abstinencia (dolor de cabeza, fatiga, dificultad para concentrarse, irritabilidad, cambios de humor)
Ansiedad, nerviosismo
Aumento de la frecuencia cardíaca, arritmias
Presión arterial alta
Diarrea, malestar estomacal
Deshidratación
Del mismo modo se recomienda que en caso de tomar cafeína sea con una cantidad moderada y supervisada por un adulto.