Washington.- Durante un evento de recaudación de fondos para su campaña de reelección el miércoles por la noche, el Presidente Joe Biden se refirió a su homólogo ruso Vladimir Putin utilizando las iniciales «SOB», que en inglés significan «hijo de perra», y arremetió contra el ex Mandatario Donald Trump por sus comentarios en los que se comparó a un líder opositor ruso Alexei Navalny, que falleció la semana pasada en una prisión en el Ártico.
«Tenemos a un loco ‘SOB’ como Putin y a otros, y siempre nos tenemos que preocupar sobre un conflicto nuclear, pero la amenaza existencial para la humanidad es el clima», dijo Biden.
Dirigiéndose a donantes en una residencia privada de San Francisco como parte de su gira de tres días por California para recaudar fondos para su campaña, Biden también dijo que quedó conmocionado por los recientes comentarios de su posible rival republicano.
Trump comparó la sospechosa muerte en prisión del líder opositor ruso Alexei Navalny con sus propios problemas legales en Estados Unidos. Un juez de Nueva York multó a Trump con 350 millones de dólares después de determinar que mintió durante años sobre el valor real de su patrimonio en los estados financieros de sus compañías. El ex Presidente aseguró que el fallo era una forma de «comunismo o fascismo».
«Algunas de las cosas que este tipo ha estado diciendo, como compararse con Navalny y decir que fue procesado – al igual que Navalny – porque nuestro país se convirtió en un país comunista. No sé de dónde diablos sacó eso», declaró Biden.
«A lo que voy es que si hace 10 o 15 años yo les hubiera dicho cualquiera de esas cosas, habrían pensado que me debían internar. Me deja atónito».
En un acto de recaudación de fondos la noche del martes en Beverly Hills, Biden destacó sus esfuerzos para ayudar a los estadounidenses de clase media y advirtió que una victoria de Trump en noviembre podría resultar en una prohibición del aborto a nivel nacional, más intentos republicanos por anular el programa de seguros médicos que se implementó durante la Presidencia de Barack Obama y más políticas que benefician de forma desproporcionada a los más ricos.
