Para muchas personas, el atole y el champurrado son lo mismo ya que tienen algunas similitudes respecto a ingredientes, sin embargo, eso no los hace lo mismo ya que el sabor, la textura y su historia son diferentes.
Según se comenta, el atole se usa desde las culturas mesoamericanas y gracias a la influencia de los españoles, que le agregaron ingredientes, fue que se crearon variantes de esta bebida, siendo el champurrado una de ellas.
Algunas de las características de las bebidas son:
Champurrado.-
El champurrado es una bebida tradicional hecha con ingredientes naturales, usa el maíz como base y se le agrega leche, chocolate, piloncillo y canela, lo cuál hace que tenga un sabor más rico y textura cremosa, además de ofrecer varios beneficios nutricionales y energéticos.
Esta bebida es más espesa que el atole debido a la combinación de masa y chocolate, suele estar más asociada con temperaturas frías y celebraciones decembrinas.
Atole.-
El atole sin embargo, tiene una historia más compleja, ya que está arraigado a las culturas aztecas y maya, que consideraban el maíz como alimento sagrado, motivo por el que se usa este mismo como la base de esta bebida.
Esta bebida era alimento cotidiano, era simple y a veces endulzados con miel, al menos hasta la llegada de los españoles, en donde se le agregaron ingredientes como azúcar, leche, piloncillo, vainilla, canela, fresa, guayaba o chocolate, dependiendo de la variante.
Tiene un sabor dulce, es espeso pero ligero y es más versátil ya que se considera tomar en cualquier época del año, especialmente en desayunos o eventos culturales.