Bruce Springsteen sigue un ritmo intenso a sus 75 años. Tocó en más de 100 conciertos en 2023 y 2024 juntos. Sus conciertos suelen durar más de tres horas. Y tiene fechas programadas hasta el próximo mes de julio.
¿Cómo se alimenta para una rutina tan agotadora?
“Tomo un poco de fruta por la mañana y luego ceno”, dijo a The Times of London en octubre. “Eso me ha mantenido delgado y malvado”.
Aunque el Jefe no lo dijo, comer una vez al día (lo que a veces se conoce como dieta OMAD) es una forma algo extrema de ayuno intermitente. El ayuno intermitente típico consiste en limitar estrictamente las comidas a periodos de tiempo concretos, por ejemplo, solo entre las 12 p. m. y las 8 p. m., o solo interdiario. Pero la dieta OMAD comprime esa ventana de alimentación diaria en una hora, de modo que obtienes todas las calorías del día en una sola sentada.
Hay pocas investigaciones sobre los beneficios para la salud del ayuno intermitente y aún menos sobre los de la dieta OMAD. Esto es lo que sabemos, y lo que no.
¿Deberías seguir la dieta?
“Una comida al día no es una buena idea”, dijo Caroline Apovian, médica especialista en obesidad del Hospital Brigham and Women’s.
Apovian es partidaria del ayuno intermitente en general, y lo recomienda a muchos de sus pacientes con obesidad. Comparado con los planes de alimentación o las dietas que requieren contar calorías o eliminar muchos alimentos, el ayuno intermitente es una forma relativamente sencilla de controlar lo que comes.
Pero para la mayoría de la gente, la dieta OMAD sería un desastre, dijo. “Si les digo a mis pacientes que coman una sola vez al día, van a pasar hambre todo el día”, añadió. Luego, es probable que coman en exceso en la cena porque dependerán de lo que haya en casa, dijo.
También puede ser difícil ingerir todas las calorías diarias de una sola vez, sobre todo si eres una persona muy activa. Mark P. Mattson, profesor adjunto de neurociencia en la Facultad de Medicina de la Universidad Johns Hopkins, dijo que quien dice seguir la dieta OMAD probablemente no la sigue exactamente: lo más probable es que coman más de una vez al día y quizá lo hagan en un rango de cuatro horas en lugar de una.
El consejo de Apovian es intentar comer solo durante las horas entre la salida y la puesta del sol (lo que técnicamente es una forma de ayuno intermitente, dijo). Sugiere tomar un desayuno rico en proteínas y comidas con muchas proteínas, frutas, verduras y cereales integrales. Después, dejar de comer a las 6 p. m. o 7 p. m., dijo, que puede ser después de la puesta de sol, dependiendo de dónde vivas.
El propio Mattson sigue una rutina de ayuno intermitente, comiendo exclusivamente entre las 12 p. m. y las 6 p. m. todos los días. En su opinión, la dieta típica estadounidense —tres comidas al día, más tentempiés, desde poco después de despertarse hasta poco antes de acostarse— es discordante con la forma en que los humanos y otros animales evolucionaron para comer en la época en que los alimentos no estaban fácilmente disponibles, dijo.
“Nuestros genes y sistemas celulares están adaptados para funcionar muy bien en un estado de privación de alimentos”, añadió.
¿Qué sugieren las investigaciones?
Los estudios sobre el ayuno intermitente suelen tener muchas limitaciones. Suelen realizarse en pequeños grupos de personas durante periodos breves, y sus resultados suelen ser contradictorios. “La ciencia está muy desordenada”, dijo Alice H. Lichtenstein, científica principal y profesora del Centro Jean Mayer USDA de Investigación sobre Nutrición Humana y Envejecimiento de la Universidad Tufts.
Algunas investigaciones limitadas sugieren que el ayuno intermitente podría ayudar a perder peso. En un estudio sobre la dieta OMAD, los investigadores descubrieron que cuando 11 adultos físicamente activos y de peso saludable hacían solo una comida al día, por la noche, durante 11 días, perdían un poco más de peso y quemaban un poco más de grasa que cuando consumían el mismo número de calorías en tres comidas al día.
Otras investigaciones demuestran que cuando los participantes restringen su alimentación a determinadas horas del día, acaban ingiriendo menos calorías en general. Esa reducción de calorías —no el horario de las comidas en sí— puede ser la responsable de la pérdida de peso.
La propia investigación de Mattson sobre el ayuno intermitente sugiere que alternar entre comer y ayunar podría activar procesos celulares que podrían mejorar la regulación del azúcar en sangre, reducir la inflamación y hacer que las células sean más capaces de hacer frente a diversas formas de estrés.
Aun así, dijo Lichtenstein, la ciencia no está clara, y sabemos que no existe un enfoque único para la forma de comer de cada persona.
“Cada persona tiene un horario distinto”, dijo; si alguien consigue comer solo entre las 7 a. m. y las 5 p. m., estupendo. Pero para mucha gente, continuó Lichtenstein, “eso no funcionaría muy bien”.