Robert Card, el autor de los tiroteos en Maine que resultaron en la muerte de 18 personas, logró evadir a las autoridades durante dos días antes de ser encontrado muerto por una aparente herida de bala autoinfligida, según una cronología de los hechos publicada este viernes. La serie de eventos pone de manifiesto la rapidez con la que Card llevó a cabo el peor tiroteo masivo en la historia del estado y cómo logró eludir a la policía en múltiples ocasiones.
La primera llamada al 911 se recibió a las 18:56 del miércoles desde un local de bowling, donde Card comenzó su serie de ataques. Cuatro agentes vestidos de civil que se encontraban cerca llegaron aproximadamente 90 segundos después de la llamada, pero el sospechoso ya había huido.
La mayoría de los sospechosos de asesinatos en masa son capturados vivos o encontrados muertos a los pocos minutos de la llegada de la policía pero, en este caso, ni siquiera pudieron verlo.
A las 19:08, los operadores de emergencia comenzaron a recibir alertas sobre un tirador en un bar ubicado a unos 6.4 kilómetros de distancia. Los primeros agentes de policía llegaron cinco minutos después, pero nuevamente, Card no se encontraba en el lugar.
“Cuando la Policía llegó a la primera ubicación, recibieron otras alertas en una segunda ubicación y luego en una tercera. Estoy seguro que fue abrumador y que hubo mucha confusión en el momento”, dijo Craig Caine, un inspector retirado del Servicio de Alguaciles de EEUU que trabajó en la Fuerza de Tarea de Fugitivos Regional de Nueva York/Nueva Jersey.
“Esa podría haber sido una de las razones por las que… nadie lo vio”, agregó.
Según la policía, siete personas murieron en el bowling Just-in-Time Recreation, ocho personas en el bar Schemengees y tres en hospitales cercanos.
Michael Sauschuck, Comisionado del Departamento de Seguridad Pública de Maine, ofreció los detalles de la actuación de Card durante una conferencia de prensa casi 48 horas después de los tiroteos.
Los primeros agentes que respondieron a los informes de los disparos en el bar llegaron aproximadamente cinco minutos después, al igual que los agentes estatales que se dirigían a responder al primer tiroteo que luego fueron desviados, afirmó Sauschuck.
Una tercera llamada se recibió el miércoles por la noche desde una instalación de Walmart informando sobre un posible tirador, pero resultó ser una falsa alarma.
El cuerpo de Robert Card fue hallado este viernes con una aparente herida de bala autoinfligida en Lisbon Falls, muy cerca de la escena del crimen. Durante la búsqueda de dos días, los negocios cerraron y los residentes se refugiaron en sus hogares por temor a más violencia.
El comisario de Seguridad Pública de Maine, Mike Sauschuck, indicó que “la búsqueda ha sido extensa, minuciosa, ininterrumpida”, que “todas estas opciones estaban sobre la mesa” y que esperan tener pronto “más información sobre cómo sucedió exactamente” esta masacre.
Sauschuck aseguró que querían dar la información sobre el hallazgo “lo más rápido posible”, pero que en el tiempo transcurrido entre la notificación de la rueda de prensa y la celebración de la misma “no hubo muchos detalles” nuevos.
En este sentido, el comisario anunció que habrá una nueva conferencia de prensa a las 10:00, hora local, de este sábado.