En la dieta de los mexicanos hay tres platillos que son muy comunes y muy parecidos, la sopa, el caldo y el consomé que podrían parecer iguales pero no lo son.
En la cocina mexicana existe la sopa, el caldo y el consomé que si bien podrían parecer lo mismo debido a que su base es líquido con verduras y proteína, hay algo que las hace diferentes.
Esto es lo que las hace diferentes:
Sopa: platillo que puede servirse frío o caliente, puede ser líquido o semi-líquido y antecede al plato fuerte.
Su base es caldo y se le puede agregar una gran variedad de ingredientes.
Caldo: se obtiene al cocinar alimentos de origen vegetal o agua son elaborados con un ingrediente o varios para crear un platillo.
Se puede usar para preparar arroz o alguna salsa y suele consumirse como caldo de res, camarón o pollo.
Consomé: es el resultado de una cocción prolongada de alimentos de origen animal en un líquido y es más concentrado que el caldo.
Los consomés se pueden clarificar con otros ingredientes para eliminar impurezas, se consume como sopa, guarnición o plato fuerte.
