En un partido que tuvo de todo, el Santos Laguna logró una victoria muy sufrida al derrotar dos goles por uno a los Rayados en el Gigante de Acero.
En la primera llegada clara del partido, Rogelio Funes Mori no perdonó al minuto 21 para hacer estallar el Gigante de acero, con una volea potente que cruzó a Carlos Acevedo.
Los locales no contaban con la respuesta oportuna de los Guerreros en una descolgada que firmó Juan Brunetta tan solo dos minutos después de verse abajo en el marcador, por lo que volvió la igualdad al encuentro.
Tras perder la ventaja, el partido cambió totalmente de perspectiva, cuando al minuto 40, Rogelio Funes Mori saliera expulsado por doble amarilla, primero al fingir una falta que en primera instancia el silbante marcó como penal, pero al entrar al VAR, se echó para atrás. Esta decisión hizo estallar al delantero que se ganó la roja por reclamar.
Los visitantes no supieron aprovechar la superioridad numérica y antes del medio tiempo, el partido se igualó en hombre por equipo por la expulsión de Lucas González en el tiempo añadido del primer lapso.
Para la segunda mitad, el Monterrey tuvo que salir a jugar con su tercer portero Fernando Hernández, al salir lesionado el Mochis Cárdenas por un duro golpe en el rostro. Recordando también que Esteban Andrada estaba suspendido para este encuentro.
Ya en la segunda parte, con 10 vs 10 el partido se mostró con más espacios y por ende más llegadas para ambos equipos, siendo mucho más insistentes los locales.
Ante la superioridad del Monterrey, el Santos se dedicó a aguantar como pudo los embates regios, y buscando cobre encontraron Oro al encontrar sobre el tiempo añadido un penal a su favor.
Harold Preciado no falló desde los once pasos y consiguieron la victoria.
