La actriz de 40 años formó parte de NXIVM cuyos dirigentes fueron acusados de tráfico sexual
Allison Mack comenzó su carrera artística cuando apenas tenía cuatro años, inició participando en comerciales y cuando tenía siete años se matriculó en el Young Actors Space de Los Ángeles, una academia de artes escénicas para actores jóvenes, después actuó en teatro y en varios programas de televisión, y a los 18 años le llegó su gran oportunidad de interpretar a Chloe Sullivan, la mejor amiga de Clark Kent en la serie estadounidense «Smallville», la cual se estrenó en 2001 y llegó a su fin en 2011 después de 10 temporadas.
La serie narra las aventuras del joven Clark Kent en el pueblo ficticio de Smallville, Kansas, durante los años previos a que él se convierta en Superman, Chloe Sullivanes uno de los personajes principales, ya que interpreta una de las mejores amigas de Clark, es editora del periódico de la escuela y está enamorada de él.
Tuvo su propia serie derivada llamada «Las Crónicas de Chloe»; en 2012, interpretó el papel de Amanda en la segunda temporada de la serie «Wilfred», junto con Elijah Wood; todo cambió cuando en abril de 2019 se declaró culpable de crimen organizado en el caso de la secta NXIVM, cuyos dirigentes fueron acusados de tráfico sexual.
«He llegado a la conclusión de que debo asumir toda la responsabilidad sobre mi conducta y es por eso que me declaro culpable hoy», dijo la actriz, según reportó el medio Hollywoodlife.
Mack pidió perdón a su familia y a todas aquellas personas que hirió por su «adherencia equivocada a las enseñanzas de Keith Reniere», líder de la secta. Según la fiscalía, la actriz recibió beneficios financieros entre otros del dirigente de la secta a cambio de reclutar esclavas sexuales para él.
NXIVM, un supuesto grupo de autoayuda en el que estaban implicadas varias personalidades conocidas, fue utilizado por su líder, el canadiense Keith Raniere, para abusar sexualmente de una larga lista de mujeres. Raniere fue condenado en octubre del 2020 en un tribunal de Nueva York por crímenes de tráfico sexual, pornografía infantil y crimen organizado.
El caso generó una gran atención en parte por la implicación de personalidades destacadas como la actriz Allison Mack, quien fue condenada en junio de 2020 a tres años de prisión por su implicación tras haberse declarado culpable de cargos de crimen organizado y de conspiración para crimen organizado y haber expresado su arrepentimiento.
¿Qué pasaba en la secta NXIVM?
El juicio del caso NXIVM se centró en un subgrupo de la secta exclusivo para mujeres llamado DOS, en el que algunos de los miembros llegaron a ser marcados con las iniciales del líder en una dolorosa ceremonia en las que se les cauterizaba la piel sin anestesia en una zona cercana al pubis. En un video de la ceremonia de iniciación de DOS presentado durante el proceso se podía ver cómo las mujeres, desnudas, permanecían tumbadas sobre una mesa, donde debían pronunciar las palabras «Maestro, por favor márcame».
Algunas de las mujeres que testificaron durante el juicio explicaron que pensaban que se estaban uniendo a un grupo centrado en el empoderamiento femenino, para descubrir más tarde que se les pedía que mantuvieran relaciones sexuales con Raniere. Además de las relaciones con el líder, la pertenencia a DOS requería que las «esclavas» tuvieran que pedir permiso para comer y tenían que entregar material gráfico o información comprometida, que podía ser publicado en caso de que se negaran a seguir las órdenes.
La actriz de televisión Allison Mack fue liberada de una prisión de California, de acuerdo con un sitio web del gobierno; Mack fue sentenciada a tres años de cárcel en 2021 después de que dos años atrás se declarara culpable de cargos de haber manipulado a mujeres para convertirse en esclavas sexuales de Keith Raniere, líder de NXIVM.
Registros en internet de la Oficina de Prisiones de Estados Unidos señalan que Mack, de 40 años, fue liberada el lunes de una prisión federal en Dublin, California, cerca de San Francisco. El diario Albany Times-Union fue el primer medio en informar de la excarcelación.
Mack evitó una condena más prolongada en prisión al cooperar con las autoridades federales en su caso contra Raniere, que finalmente fue sentenciado a 120 años de cárcel después de ser declarado culpable de cargos de tráfico sexual.
Mack ayudó a los fiscales a obtener evidencia que demostraba cómo es que Raniere creó una sociedad secreta que incluía a mujeres adoctrinadas a las que marcó con sus iniciales y las obligó a tener relaciones sexuales con él.
Además de Mack, en el grupo también estaba una heredera de la fortuna de la licorería Seagram’s, Clare Bronfman; y una hija de la estrella de televisión Catherine Oxenberg, famosa por su participación en “Dynasty”. A la larga Mack repudió a Raniere y expresó “remordimiento y culpa” antes de su audiencia de sentencia en un tribunal federal de Brooklyn, Nueva York.