La Cámara Baja de Colombia tumbó este martes una nueva iniciativa parlamentaria que buscaba prohibir gradualmente las corridas de toros en uno de los países con mayor tradición taurina de América.
Ha sido archivado con 11 votos (contra 9) el Proyecto que busca prohibir progresivamente las prácticas de entretenimiento cruel con animales», informó el Legislativo en Twitter.
Radicada a mediados de 2022, la propuesta había logrado pasar dos debates en el Congreso y le faltaban dos más para convertirse en ley.
Los promotores de la iniciativa contaban con el respaldo del presidente izquierdista Gustavo Petro, pero lo acusaron de no haber haber hecho suficiente por su aprobación.
Hemos recibido un golpe muy duro (…) Perdimos una batalla pero no la guerra. Vamos a explorar una última posibilidad que tenemos que es apelar esta decisión», anunció la senadora Andrea Padilla del partido Alianza Verde en un video publicado en sus redes sociales.
El proyecto aspiraba prohibir las corridas de toros en un plazo de tres años y regular las tradicionales corralejas, otra herencia de la colonización española en la que numerosos aficionados lidian al animal al mismo tiempo en un espectáculo peligroso y popular del Caribe colombiano.
Es la segunda vez que este Congreso supuestamente progresista, que defiende la vida, que es el Congreso del gobierno del cambio, permite que se hunda la prohibición de las corridas de toros. El compromiso del gobierno en esta materia ha sido prácticamente nulo», se quejó el diputado liberal Juan Carlos Losada.
Petro ha pedido a los alcaldes suspender en sus ciudades «actos donde exista el maltrato animal», pese a que la Corte Constitucional reconoció en 2018 las corridas como tradición cultural y delegó al Congreso eventuales restricciones.
En algunas capitales como Medellín y Bogotá ya no se celebran las corridas.
En Latinoamérica la tauromaquia está prohibida en Brasil, Argentina, Uruguay, Chile y Guatemala.